Polis irrumpen en una juguetería por la ley antiburka y era un Lego Ninjago

La Policía de Viene irrumpió en el local tras el aviso de una mujer con el rostro tapado. Resultó ser un disfraz de la serie Lego Ninjago

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Entre un burka y un disfraz de Ninjago hay una "pequeñísima" diferencia...

EP – La Policía austriaca ha irrumpido en una juguetería de Viena tras recibir un aviso de que había una mujer con el rostro tapado en lo que luego se constató que era un disfraz de Lego Ninjago, una serie y película de animación en la que los personajes llevan el rostro cubierto.

La mujer estaría incumpliendo la ley antiburka por taparse la cara, lo que provocó una «acalorada» discusión, ha informado la Policía, según recoge el periódico austriaco ‘Kronen Zeitung’.

Los agentes acudieron al lugar y la mujer se quitó el disfraz de la cara, pero no se impuso multa alguna porque el caso se encuadró en el precepto de «ocupación profesional» previsto en la ley, ha informado la Policía vienesa a través de Twitter.

Otras anécdotas de la ley

La ley antiburka ha deparado otras anécdotas, como la denuncia contra la mascota del Parlamento austriaco, Lesko, un conejo utilizado durante la jornada de puertas abiertas con motivo del Día de la Independencia. «Es una ley inaplicable. No se ha redactado para prohibir el burka por motivos constitucionales y ahora tenemos esta mierda», ha señalado el secretario general del principal sindicato policial, Hermann Greylinger, en declaraciones al periódico ‘OE24’.

Sí hubo multa de 150 euros contra un hombre vestido de tiburón para promocionar ofertas de la tienda de electrónica McShark de Viena porque se negó a quitarse el disfraz. Además, el pasado 11 de octubre un policía multó a una estudiante universitaria con 50 euros por negarse a retirar el pañuelo que le cubría la cara después de que la chica criticara la ley «irrisoria».

La ley antiburka entró en vigor el pasado 1 de octubre y prohíbe a la gente cubrirse la cara en público. La norma se aprobó en mayo e incluye además que los solicitantes de asilo realicen gratuitamente trabajos para las administraciones públicas. Las excepciones son laborales, médicas, por frío o por ocasiones «tradicionales».