Cada año por estas fechas las redes sociales se inundan de dos fotos. La de Eva Casado y la de su doble, otra joven que es idéntica a ella.
Eva conoció de su existencia, según cuenta en Facebook, por casualidad, durante un vuelo a México. Vio su cara en una revista, en un reportaje sobre la Tomatina de Buñol y debió alucinar, por son como dos gotas de agua. Comenzó entonces en su interior la idea de localizarla y puso en marcha una serie de movimientos en busca de «la chica de la Tomatina 2010».
No es de extrañar, porque ya es raro que dos personas puedan parecerse tanto…
La cuestión es que lleva ya cinco años buscando y no se ha cansado. Según cuenta en Facebook, «descubrí que en el hospital en el que nací había habido robos de bebés y que había habido, también, en esa época una red de tráfico de bebés Madrid-Valencia, los robaban en Madrid para llevarlos a Valencia, supongo que para que en un futuro fuera más difícil encontrarse».
Para alimentar aún más sus sospechas, tiene antecedentes familiares: «Mi madre es gemela, lo cual también me descoloca, pero al preguntarle a ella me dijo que no estaba dormida en el parto y que le parecía muy raro, eso sí, al contarle lo de los robos en el propio hospital vi asomar un brillo en sus ojos que me quedó clavada en el corazón».
La cuestión es que no pudo tirar de ese hilo para localizar a su doble. «El hospital cerró y poco he podido averiguar, realmente no tengo ninguna certeza de que nuestra sangre sea la misma. Quizá es todo fruto de la casualidad y simplemente la genética ha querido jugar a hacer unas dobles tan similares que podrían pasar por gemelas».
Ella no cesa en su empeño y miles de personas por estas fechas comparten sus fotos. Quizás algún día se desvele el secreto de esta historia.
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